¡BRAVO, MONSEÑOR!. LAS COSAS, POR SU NOMBRE.

CONSIDERÓ EL ABORTO UN "ERROR"
El arzobispo de Mérida-Badajoz asegura que se "hablará del aborto como un hecho lamentable de la historia de España”

El arzobispo de Mérida-Badajoz, monseñor Santiago García Aracil, aseguró ayer en la capital pacense que el niño "no es un trozo del cuerpo de la madre sobre el que pueda tener capacidad de decisión", sino que "es un ser vivo de tal modo que no hay ningún científico que haya podido demostrar que no hay vida”
A preguntas de los periodistas sobre la modificación de la Ley del Aborto, monseñor García Aracil señaló que se "hablará del aborto como un hecho lamentable de la historia" de España y que, pese a que desconocía los trámites del proceso de modificación de la ley, se declaró “contrario” al aborto, que consideró de “error”.En su opinión, "en una sociedad plural hay que estar abierto a una actitud que permita un diálogo que conlleve la posibilidad de un encuentro y de una cooperación, para un tema", en el que dijo "estar convencido se escribirá desgraciadamente cuando se haga la historia de nuestra época". Añadió, además, que "los miembros de la Iglesia" no deben abordar el aborto "desde el enfrentamiento, sino desde la comprensión hacia las madres que lloran", un hecho que, afirmó, "estadísticamente se podría confirmar", un aspecto del aborto del que dijo se atrevía a hablar porque así se lo habían "manifestado personalmente". El arzobispo pacense defendió que el niño "no es un trozo del cuerpo de la madre sobre el que pueda tener capacidad de decisión", sino que "es un ser vivo de tal modo que no hay ningún científico que haya podido demostrar que no hay vida, y otra cosa es que acepten sobre al afirmación molecular de que hay vida como válido el concepto jurídico de vida hasta el momento de nacer". A este propósito, consideró que es un "problema muy serio que hace pensar en desgracias muy próximas en la historia que parecen inconcebibles y que preocupan mucho a los que creen que la vida es un regalo de Dios o para los que creen que la vida es un hecho real en las entrañas de la madre".