Un Testimonio para HOY

SE SINTIÓ OBLIGADA

Leticia, abortó a los 17 años: “Nadie me apoyó pese a que yo quería tener a mi hijo”

Un embarazo adolescente y una familia que no aceptó su estado. Pese a que conoció a Red Madre y le prestó todo su apoyo, se sintió presionada por su familia a abortar. Hoy, arrepentida, ha dejado España porque quiere empezar de nuevo


¿En qué circunstancias y a qué edad te quedaste embarazada y tuviste que abortar?

Me quedé embarazada a los 17 años, del chico con el que estaba saliendo. Él dijo que me respetaría, que estaría siempre a mi lado, pero la noticia del embarazo le dejó helado, no supo reaccionar, simplemente me miró y dijo: “tú sabrás lo que haces, pero yo no puedo encargarme de nada más que de estudiar”. No pude decírselo a nadie, ni a mis amigas, ni a mis padres, me habrían matado del disgusto.

¿Qué sentiste durante todo el proceso?

Yo no quería abortar, pensé que sola podría con este tema, que podría hacerme cargo del hijo que esperaba. Me sentía fatal, no era el momento de estar embarazada, iba al Instituto y se me iba a notar tarde o temprano. Pasaron unas semanas de sufrimiento y angustia hasta que me decidí a pedir ayuda por Internet.

¿Cómo conociste Red Madre? ¿Cómo te ayudó?

Escribí un correo a la Fundación Red Madre, me respondieron en seguida y fui a hablar con ellas en persona. Me apoyaron en todo, incluso fueron a hablar con mis padres para ayudarles a aceptar la noticia de mi embarazo. La conversación con mi madre fue muy larga, y muy dura. Mi madre no quería apoyarme con mi embarazo, decía que si abortaba aprendería a no acostarme con chicos nunca más. Yo no paraba de llorar, no quería hacerlo. Las mujeres de la Fundación Red Madre le dijeron a mi madre que si me obligaba a abortar nuestra relación se podría estropear, que dejaríamos de hablarnos por un tiempo. Mi madre no las escuchó, ella pensaba que entre nosotras nada cambiaría si yo abortaba. Pero se equivocó. A la semana siguiente, tras hablar con mi padre y negarse también a apoyarme, me llevaron a una clínica en Madrid donde me hicieron el aborto. Lo pasé fatal, no dejaba de llorar. No podía dormir, ni coger el muñeco de peluche que me regalaron en Red Madre, me sentía muy culpable. Ahora no puedo mirar a mi madre a la cara ni hablar con ella, todo el día estamos discutiendo, regañando por cualquier cosa. He decidido irme a mi país, Ecuador, con mi abuela, no puedo seguir viviendo en mi casa, con mis padres y mi hermana, que no quisieron apoyarme cuando más los necesitaba y me obligaron a hacer algo que no quería, abortar a mi hijo.

¿Es posible empezar de nuevo? ¿Qué le dirías a una persona que ha pasado lo mismo que tú?

Quizás fuera de la ciudad donde aborté pueda empezar de nuevo, pueda recuperar la alegría de vivir. En la Fundación Red Madre me ofrecieron terapia post-aborto, me dijeron que seguirían a mi lado y me han estado llamando varias veces para interesarme por mi estado de ánimo, y se lo agradezco mucho. Pero lo he decidido, me voy de aquí, es muy duro acostumbrarse a la idea de no haber podido hacer nada por salvar la vida de tu hijo. Sé que soy muy joven para ser madre, pero en realidad ya era madre al estar embarazada de 10 semanas. Ojalá ninguna chica de mi edad tenga que pasar por lo que yo he pasado. Ojalá los padres apoyaran más a las chicas adolescentes que se quedan embarazadas sin haberlo planeado, porque al final sufre toda la familia.